Nuestra
reflexión para hoy tiene un propósito...
...Recordarnos, que somos almas, y que los
verdaderos triunfos, riquezas y tesoros de cada uno, están en su corazón.
Vivimos en un mundo de muchas ilusiones y
desilusiones causadas por el materialismo, un mundo material que a veces es muy
divertido, pero también es muy confuso, donde es muy fácil creer que todo es
nuestra imagen, que valemos más por lo
que tenemos y olvidamos que no sólo somos materia, que existimos más allá del cuerpo.
Vivimos
en confusión, y dentro de todo es normal, si observamos que nuestra cultura,
nos ha enseñado, que el poder, el dinero, las posesiones materiales, un físico
perfecto, son lo más importante. Nos
enseñan que para ser felices, tenemos que parecernos a ciertas personas, a
ciertos esquemas de vida… y si no lo conseguimos estamos fuera del éxito.
Esos
mensajes, nos hacen despreciar nuestra propia realidad y faltarnos el respeto, a
nosotros mismos.
Necesitamos vivir con más equilibrio entre
la materia y la esencia, seria un error, irnos al extremo y abandonar todas
nuestras posesiones, así como descuidar nuestro cuerpo físico.
Seamos más integrales, la clave está, en el
centro, está en el equilibrio, en la armonía interior, en saber darle a cada
cosa su lugar, para no sobre valorar lo que es insustancial.
Recordemos que somos Almas y que existimos en
un Universo de Energía, que es un viaje Evolutivo y mágico, y cada uno de nosotros va creando su
propio camino, con sus propios talentos
que son únicos.
Cada
uno de nosotros está aprendiendo algo diferente, somos todos distintos, no
compite ninguna Alma con otra, todos estamos unidos energeticamente.
La materia nos regala oportunidades bellísimas
para los sentidos, el Alma nos regala, la verdadera felicidad, es inherente a
nuestra esencia.
Recuerda…tu eres un Ser de inmenso valor y
potencial. La crítica o alabanza, no puede alterar este saber si te das cuenta tú
mismo. Deja de culpar a otros, por lo mal que te hacen sentir y Crea dentro de ti, un lugar de paz ...para el equilibrio de tu Ser.
Ramón Padilla